Las freidoras de aire se han convertido en un electrodoméstico fundamental en las cocinas de todo el mundo debido a las enormes ventajas con las que se presentaron al mundo: cocina más saludable, poder freír con un 90% menos de aceite con «casi» los mismos resultados de sabor y textura o la comodidad de poner a trabajar un electrodoméstico mientras dedicas tu tiempo a otras elaboraciones.
Pero hay otra gran ventaja que debemos tener en cuenta en estos tiempos donde el ahorro de energía es una cuestión fundamental en la economía familiar. Las freidoras de are gastan entre un 45 y un 70 por ciento menos luz que un horno, y una airfryer es, en definitiva, un horno de convección en miniatura.
En esta ocasión vamos a aparcar por un momento las reseñas de electrodomésticos que hacemos siempre en electroexpretos.es y vamos a hablar de cómo ahorrar energía cocinado con tu freidora de aire. Vamos a ver argumentos, comparativas de gasto y trucos para exprimir cada vatio de potencia en beneficio de nuestros bolsillos.
Ahorro con respecto al uso del horno convencional
Un horno convencional tiene entre 3.000 y 5.000 W de potencia y generalmente una capacidad en torno a los 70 litros. Una freidora de aire de, pongamos 6 litros, que ya tiene un tamaño considerable en el que nos cabe un pollo entero, tiene como mucho 1.600 W.
Al comparar el consumo de energía de un horno y de una airfryer de 6 litros para asar un pollo entero… ¿Qué aparato crees que lo va a hacer con menos gasto de luz, teniendo en cuenta que el tiempo y la temperatura van a ser más o menos los 45 minutos que tarda en asarse un pollo de tamaño medio a 180ºC?
Y eso si no contamos el pre calentamiento. En una airfryer el punto máximo de calor se consigue en apenas 2 minutos, un horno de convección, en el que perfectamente podríamos poner a freír sin aceite unas patatuelas, para alcanzar los mismos 200 grados necesarios que en la freidora de aire, que menos que 5 minutos para llegar a esa temperatura. y en el pre calentamiento es donde más energía gasta un horno.
Son sólo dos ejemplos, pero hay más en cuanto a ventajas con respecto al horno convencional. También podríamos hablar de pizzas o de repostería, desde luego.
¿Y con respecto a la fritura en sartén? ¿Se ahorra energía?
Ahí debemos decir que no, no hay ahorro de energía con respecto a freír unas patatas, unos nuggets de pollo o unos pimientos. En la sartén todo va más rápido. Eso si, con el triple de aceite. Aceite que está estos días a 10 euros el litro. Ahorro hay, si, pero no de luz.
Clasificación energética de las freidoras de aire
Las airfryers son electrodomésticos que suelen andar en las categorías A, B o C. No obstante, desde marzo de 2021, la Unión Europea cambió a un nuevo etiquetado energético más estricto, donde la clase A desaparece y se sustituye por las clases D, E, F y G, siendo la D la más eficiente.
Esto significa que las airfryers pasarían a estar entre la D y la F. Las marcas no suelen informar de forma clara y concisa de la clasificación energéticas de las freidoras de aire como si lo hacen por ejemplo con los electrodomésticos de gama blanca.
Trucos para ahorrar energía al cocinar con la freidora de aire
Las freidoras de aire, como hemos visto, suponen una ventaja en comparación con el gasto de luz que tiene un horno, pero eso no significa que sean aparatos que gasten poca energía. Las freidoras de aire de 5 a 8 litros, que son en estos momentos las más demandadas, tienen potencias que van desde los 1.600 hasta los 2.000 W. Eso es gasto de energía, y además debemos añadir que el tiempo de cocinado es mayor que en las frituras convencionales. Por eso, si tu objetivo es ahorrar energía al cocinar deberíamos seguir estas pautas a la hora de utilizar las freidoras sin aceite:
Aprovecha al máximo su capacidad: Cocina varias cosas a la vez en lugar de hacerlo en varias tandas. Esto te permitirá optimizar el uso de energía y reducir el tiempo total de cocción. Si tu airfryer permite el cocinado a varias alturas, como al Actifry de Tefal o dispones de accesorios como rejillas o bandejas a distintas alturas aprovecha el espacio de la cubeta, por ejemplo friendo las patatas y el pescado, pollo o verduras a la vez.
Precalienta solo cuando sea necesario: La mayoría de las freidoras de aire no necesitan precalentarse, especialmente si vas a cocinar alimentos congelados o precocinados, y además algunas como las Philips tienen sistemas de calentamiento rápido que economizan el tiempo que utilizamos la conexión de electricidad de la airfryer.
Desenchufa la freidora cuando no se esté utilizando: Como cualquier electrodoméstico dotado de pilotos o pantallas, las freidoras de aire mantienen un pequeño gasto de energía cuando permanecen enchufadas a la red. Si no es necesario no las dejes enchufada, todo suma.
Cocina a la temperatura adecuada: Aparte de la experiencia que te va a dar el uso día a día de tu airfryer, que te llevará a cocinar cada receta a su temperatura, economiza la potencia con las temperaturas. El hecho de que una airfryer tenga 1.500 W de potencia no significa que se deba utilizar toda esa potencia al cocinar. Por ejemplo, un filete de pollo se beneficia de temperaturas menos agresivas, las alitas lo mismo, de la media hora que nos lleva cocinar una tanda de alitas, tan solo los últimos 5 minutos deberíamos poner a tope la freidora, el resto del tiempo con tenerlas a 160ºC es más que suficiente.
El gasto de energía es la conjunción de tiempo y potencia (calor) empleados, por lo tanto, para un cocinado eficiente desde el punto de vista del gasto de energía deberemos encontrar el equilibrio entre el fuego y el tiempo sin sacrificar los resultados de nuestro plato, que es al fin y al cabo lo más importante.